El caserío de Santa Lucía-Los Barrancos, en el litoral güimarero de Agache, conocerá hoy en Madrid el futuro que le depara a corto plazo, después de los derrumbes sucedidos en junio que obligaron al precinto de una treintena de viviendas y el desalojo de sus ocupantes, solo ocho de ellos residentes habituales de un núcleo costero que tiene sobre sí la espada de Damocles de una posible demolición al incumplir la Ley de Costas, todo lo contrario de lo que ha sucedido con otros barrios de la zona como La Puente, La Caleta y Punta Prieta, que sí han superado ‘el corte’ de Costas tras ganar los pleitos, algunos de ellos interpuestos por el Ayuntamiento de Güímar.
La misma corporación que hoy estará en Madrid defendiendo los intereses del centenar de habitales de Santa Lucía-Los Barrancos. Hasta la capital de España se han trasladado el alcalde, Rafael Yanes, y la primera teniente de alcalde, Carmen Luisa Castro, que junto con el diputado socialista José Segura y el presidente de la Asociación de Vecinos de Santa Lucía, José Herrera, se reunirán con el director general de Costas, Pedro Ríos, para estudiar la petición de autorizaciones que permitan rehabilitar la zona afectada tras los derribos. En la entrevista, el alcalde hará entrega a Ríos del estudio geotécnico elaborado por la empresa Icinco, y que fue encargado tras los desprendimientos producidos el pasado 3 de junio.
Hay que recordar que dicho estudio revela que se deben desalojar alrededor de cuarenta viviendas de la zona afectada por prevención. El estudio también indica las medidas de seguridad que se deben llevar a cabo para evitar nuevos desprendimientos, que van desde el mallado hasta el reforzamiento de la pared. El problema radica en que estas obras no se pueden llevar a cabo hasta obtener la autorización de la Dirección General de Costas, algo que se espera sea efectivo en el día de hoy.
El alcalde, Rafael Yanes, y el presidente del colectivo de vecinos, José Antonio Herrera, se han mostrado optimistas con la posibilidad de obtener el visto bueno de Costas y de poder acometer la obra de reforzamiento de seguridad en la zona, sobre todo en la cueva natural que da cabida a más de veinte viviendas. Sin embargo, el pesimismo llega cuando se pregunta por el futuro de Santa Lucía como núcleo urbano consolidado, ante la evidencia que incumple la orden del Ministerio de Medio Ambiente, que obligaba al deslinde de 100 metros en el litoral de Agache, después de que entrara en vigor la Ley de Costas en 1988. No obstante, los vecinos se acogen a otras sentencias habidas en caseríos como La Puente o El Tablado, en las que se establecía en 20 metros la zona de servidumbre.
El Socorro
Los representantes del Ayuntamiento de Güímar aprovecharán la visita a la Dirección General de Costas para buscar una solución definitiva para la ubicación de la estación de bombeo de El Socorro, motivo por el que les acompañará en la reunión la consejera de Panificación Territorial del Cabildo Insular de Tenerife, Pino de León. El proyecto inicial aprobado por el Consejo Insular de Aguas establecía ubicar dicha estación en el casco urbano del barrio, situación a la que los vecinos se han negado en rotundo, argumentado que es posible colocarlo en el extrarradio.
El problema es que para poder colocar la estación de bombeo en la zona que demandan los vecinos, necesitan la autorización de la Dirección General de Costas debido a su cercanía al mar, autorización que ya ha sido denegada, aunque según Lázaro Mendoza, presidente de la Asociación de Vecinos de El Socorro, Costas podría conceder el permiso si se presenta un proyecto de avenida hacia esa estación, unos 300 metros hacia el sur.
Bajo La Cuesta
También en Candelaria, después de lo sucedido con Chivo, el contencioso con Costas no ha acabada y uno de los núcleos que está en entredicho, muy cerca de allí, es Bajo La Cuesta, donde unas 50 familias tratan de ganarle el pulso a la Demarcación de Costas, haciéndose fuerte con una sentencia del 2006 en donde se recoge un deslinde que está a 170 metros del mar. Pese a ello, el partido Alternativa Nacionalista Canaria (ANC), sin representación política en el Ayuntamiento de Candelaria, ha denunciado a través de una nota enviada a los medios, que el alcalde Gumersindo García ha comenzado una nueva ofensiva contra los habitantes del barrio costero de Bajo La Cuesta, dado que pretende derribarlo. Esta organización de izquierda nacionalista ya se ha reunido con varios vecinos con el fin de buscar posibles soluciones a este problema.
Este colectivo está dispuesto a movilizarse ante este nuevo ataque, similar al sufrido en Cho Vito. ANC recuerda que el alcalde de la localidad lleva tiempo empeñado en derribar este barrio. Para ello, se ha escudado en el riesgo de desprendimientos que podría sufrir este núcleo vecinal. Esta organización entiende que en caso de que el riesgo sea real hay formas de establecer una adecuada contención por parte de la entidad local, acometiendo las obras precisas, que podrían, incluso, resultar más baratas que el propio derribo. Los representantes de este partido se han puesto a disposición de los afectados, a los que respaldarán en las acciones reivindicativas que estudien llevar a cabo y animan al colectivo a no desfallecer.
http://www.diariodeavisos.com/2011/09/11/tenerife/en-busca-de-luz-para-santa-lucia
